RESUMEN de la ETAPA 8
- Fecha: 13 de Agosto de 2014
- Km etapa: 67.86 km (Asfalto: 26.7 Km - Camino: 41.3 Km)
- Duración etapa: 4 horas y 14 minutos en movimiento
- Desnivel positivo: 358 m
- Enlace de archivo *.gpx: Etapa 8: SALAMANCA - ZAMORA
- Enlace Garmin Connect: Etapa 8 - Connect
- Km totales acumulados: 647.48 km
IMPRESIONES de la ETAPA
La crónica de esta etapa, debe de comenzar en la tarde-noche de ayer y es que en el albergue de Salamanca conocimos a Miguel, un "bicigrino" de Gandía que llevaba "solo" 2200 kilómetros en 28 días. Después de salir desde Valencia con dirección a San Sebastián, había hecho el camino del Norte, aprovechando para visitar todo el Cantábrico y tras unas cuantas vueltas había llegado a Santiago y ahora volvía por la Vía de la Plata en sentido contrario, sin saber muy bien ayer mismo si tirar para Sevilla o emprender la vuelta para casa. Estuvimos charlando un buen rato con él, aprendiendo de todo lo que nos decía y los consejos que nos daba. Esto si que nos pareció que es un "makina" de bicigrino, ciclista o lo que sea, porque el día anterior a nuestra charla, había hecho 180 kilómetros en una etapa, ahí es nada.
Con todos los consejos de Miguel en la mente, nos pusimos en marcha a las 7:25 de la mañana con dirección a Aldeaseca, la temperatura era de nuevo fresquita, por lo que nos tuvimos que sacar del fondo de las alforjas la manga larga. Teníamos por delante un tramo de asfalto de 7 kilómetros, para abandonar Salamanca. Tardará tiempo en que olvidemos la comida que nos metimos ayer en el cuerpo, jejeje.
Una vez completados estos primeros kilómetros, nos desviamos a la izquierda para tomar la ruta por el camino oficial, comenzando ahí el primer tramo de camino del día. El paisaje que empezábamos a ver, era algo mas feo a todo lo que veníamos viendo en los días anteriores.
Nos paramos a inmortalizarnos en un campo de girasoles, aun sin salir el Sol.
Sobre las 9 de la mañana, nos presentamos en Calzada de Valdunciel, e hicimos la primera parada de verdad, para tomar unas magdalenas recién hechas, en la panadería del pueblo.
Justo a la salida del pueblo, en un cruce donde buscábamos las fechas amarillas, apareció de la nada Javi "el sevillano" que nos encontramos en Riolobos hace algunos días. Desde ese momento hasta el final del día, hemos pedaleado los 3 juntos.
Nos tocaban ahora, 20 kilómetros de asfalto por la N-630, pensábamos que seria un tramo muy facilito, pero nada mas salir a la carretera, nos encontramos con un viento en contra muy fuerte, tanto que nos ha dejado tocadas un poco las fuerzas, ha sido duro o muy duro, según se mire.
Con estas condiciones, hemos abandonado la provincia de Salamanca y hemos entrado en Zamora.
Una vez en tierras Zamoranas, el primer pueblo de nuestro paso, es El Cubo de la Tierra del Vino y justo a la salida del mismo había que retomar la opción de los caminos, ya solo nos quedaban 32 kilómetros para terminar la etapa.
A falta de solo 14 kilómetros para llegar al destino, nos hemos encontramos a 2 peregrinos que iban a pie, uno era de Sevilla y otro de Ciudad Real, aprovechamos para charlar con ellos un rato, cuando retomamos la marcha, me fui pensando que merito tiene hacer 40 kilómetros al día con una mochilas bastante pesadas. (Hasta el momento el ser peregrino es sinónimo de gente cojonuda).
Antes de ver Zamora en el horizontes, nos encontramos con un Monumento Conmemorativo a los peregrinos, donde nos inmortalizamos de nuevo.
Y sin darnos cuenta entrabamos en Zamora a las 12:50. Lo que en principio era una etapa fácil, por el viento en contra de los tramos de asfalto se había complicado, pero la llegada al destino era ya un hecho y contaba como otra etapa finalizada, una menos para completar la ruta.
Una vez en esta ciudad, hemos dado una vuelta para conocer el centro histórico, visitando la plaza Mayor, el Castillo y su Catedral. En el citado Castillo, hemos saludado a una familia de Granada, al final va a ser cierto eso de que los "granainos" estamos en todos los lados. jejejeje.
Pero la anécdota buena estaba por llegar y es que aunque suene un poco a ficción, estábamos llegando al albergue de Zamora, cuando veo que Jorge se paró con alguien en medio de la calle, hasta ahí cosa nada extraña. Cuando se despidió me comentó que era un compañero de la facultad de Granada. He mirado a Jorge y le he preguntado : ¿Estas de coña?.
Aún no me lo creo, encontrarse con alguien de su trabajo a mas 900 kilómetros de casa, serán cosas del camino.
Hola Fernando soy Jesús Doña y desde la orilla de la playa te leo todos los días con envidia y de la mala. Ya que como ciclista me encantaría hacer el camino, pero sólo quería darte mucho ánimo a ti y a Jorge en las etapas que os quedan. Un abrazo fuerte y ya me contarás en el quiosco en persona
ResponderEliminarHola Jesús. me alegra leerte por aquí. Entiendo que para los buenos ciclistas como tu, esto será poca cosa, aunque desde la orilla igual se ve mejor.
EliminarGracias por los ánimos y nos vemos pronto en el Kiosco, ya te contaré todo.
Un abrazo.
Hola Fernando, aqui me ha pasado lo mismo que la anécdota que tú cuentas, vivo en una ciudad de más de quince millones de habitantes y el otro día corriendo a 50 km de mi casa, lejos de guirilandia voy y me encuentro a otro compañero de la empresa también corriendo. Ya sabes el mundo es un pañuelo....
ResponderEliminarSigo el blog con interés casi todos los días, y me muero de la envidia...... no tengáis prisa por llegar, Santiago no es la meta, la meta es el camino.
Un fuerte abrazo para tí y tu compañero. Cuidaros y disfrutad!
Buenos Pablo, me hubiera gustado visitarte en Mérida, será en la próxima.
EliminarEs cierto que el mundo es un pañuelo, jejeje.
Un abrazo grande y gracias por leerme por aquí.